ZOYA SAGANENKO: LA DANZA ES UN LENGUAJE INTERNACIONAL

Por Ana González Vañek

IG @danzaycomunicacion


Me gustaría reivindicar, una vez más, el inmenso poder transformador de la danza. Como práctica social que puede resignificar experiencias individuales y colectivas, este poderoso arte, en todas sus formas y expresiones, puede sanar nuestro mundo. En el sendero de la redención a través de la danza, tuve el placer de descubrir el hermoso trabajo de Zoya Saganenko, nacida en el este de Ucrania, quien se ha dedicado a la danza toda su vida. Atravesó un largo proceso, desde sus sueños de infancia, hasta su realización como artista en la escena profesional y en la docencia internacional, y también a través del trauma, la guerra y la necesidad de encontrar un hogar donde vivir para siempre: "Verdaderamente, creo que la danza es sanadora, pues lo he comprobado en mí misma. Asimismo, estoy convencida de que la danza es un lenguaje internacional, hablado por quienes tienen algo para decir. En este sentido, considero cada nueva experiencia de movimiento, como un tesoro precioso en mi sendero creativo."


Gentileza - Zoya Saganenko

AGV: - ¿Cuándo y dónde comenzaste a bailar?

ZZ: Comencé a bailar cuando tenía 8 años, en mi pueblo Donetsk, en el este de Ucrania. Hasta que tuve 17 años, estudié danzas de salón y participé en competiciones. El mundo de las danzas de salón es un deporte real en el cual eres completamente dependiente de tu pareja y de sus logros. Llegué a la coreografía moderna un poco tarde, alrededor de los 18 años, cuando decidí explorar nuevos aspectos del movimiento. Luego, comencé mi entrenamiento en danza teatro moderno, donde tuvimos estudios profundos de danza clásica, moderna y contemporánea. Estaba obsesionada (risas). Durante muchos años, tomé todas las master clases posibles, para añadir al programa de mi entrenamiento regular: hip hop, jazz, comercial y street dance. Si hubiera sido por mí, no hubiera dormido, hubiera bailado sin fin. A los 22 años tuve una lesión en la espalda. Durante medio año fue difícil para mí, incluso al caminar lentamente. Los médicos me prohibieron categóricamente incluso la posibilidad de pensar en volver a bailar en mi vida. Durante muchos meses de tratamiento, pensé acerca de qué decisión tomar, si debía rendirme al sendero de mis sueños, o tomar el riesgo. Y finalmente, me di cuenta de que no había nada para pensar al respecto. En cualquier caso, intentaría y haría lo que pudiera con lo que tenía. Gradualmente, regresé al entrenamiento, aprendiendo a escuchar profundamente las señales de mi cuerpo y a darle descanso cuando fuera necesario. Me mudé a la capital y allí comenzó mi camino creativo en el campo de la danza profesional.

AGV: ¿Cómo describirías tu evolución artística?

ZZ: Tuve la suerte de triunfar como bailarina profesional, incluyendo numerosos trabajos videos oficiales de música y proyectos de televisión, así como también en obras de teatro, como jurado y maestra a nivel internacional. Bailar en el escenario está indefectiblemente unido a la actuación, así como también a la performance. Tuve la oportunidad de interpretar diversos roles, desde una tentadora fatal hasta una zombie. Gradualmente, el camino de la danza me llevó al deseo de aprender los secretos de la actuación en mayor profundidad. En los últimos años, fui lo suficientemente afortunada para interpretar un rol protagónico en 3 películas cortas. Fue una maravillosa experiencia que influyó en mí tanto como bailarina, como coreógrafa. Actuar también es movimiento. Es una danza de las emociones, de la voz de la expresión facial, de las experiencias. Creo que la esencia de la evolución artística para mí es una transición gradual del deseo físico de crear la imagen perfecta, al deseo de transmitir tu idea a través de la danza. Esto último no excluye lo formal sino que lo complementa. La narrativa puede ser obvia o, en el caso contrario, abstracta, surrealista. Disfruto al contar historias de cualquier tipo, usando todos los instrumentos disponibles.


Gentileza - Zoya Saganenko


AGV: ¿Dónde estás trabajando actualmente y cuáles son tus objetivos principales?

ZZ: Actualmente estoy creando y estructurando un curso de improvisación en danza, el cual planeo lanzar tanto de manera online como presencial en primavera. A lo largo de años de práctica, he acumulado mucha información que me gustaría compartir. Tengo certeza de que esta práctica es útil tanto para bailarines profesionales como amantes de la danza. El movimiento es un generador de energía vital. Es sanador, mantiene la mente en forma y el cuerpo listo para el descubrimiento. De una u otra manera, el movimiento es accesible a absolutamente todos, sólo que la gente no siempre tiene el coraje y la tenacidad de sumergirse en sus profundidades. Creo que la manera más fácil de hacer esto es conectarse uno mismo con la improvisación y la danza contemporánea. Hay mucha libertad y aceptación de quién eres por quién eres ahora. Así que mi principal objetivo en el presente, es crear un producto que brindará máxima motivación y beneficios a todas las personas interesadas en explorar el mundo del movimiento libre. En cuanto a mi realización artística, tengo planes que no es el momento de compartir ahora. En este sentido, soy una persona muy supersticiosa. Prefiero no hablar de muchas cosas que aún no hayan pasado pero que están siendo trabajadas, sólo para no disipar la energía de la intención a través de la palabra.

AGV: Viendo tu "diario de danza", el cual podemos encontrar en tus redes sociales, ¿ cuáles son tus intenciones principales con este proyecto?

ZZ: La idea de llevar un diario de danza, no llegó a mí por casualidad. Fue durante la pandemia, antes de una segunda vuelta de estrictas restricciones. Había estado practicando improvisación durante mucho tiempo y tuve la suerte de ir a bailar sola al estudio siempre que pude. En aquel momento, cuando todo el trabajo presencial y planes creativos fueron congelados, colgando en el aire una vez más, sentí una urgente necesidad de crear un nuevo y permanente punto de contacto con el mundo exterior. Me di cuenta de que con la ayuda de un diario de improvisación, podría practicar regularmente las herramientas que había adquirido tiempo atrás, explorarme e inventar nuevas, e inspirar a otras personas interesadas en los principios del movimiento libre. En general, soy una persona muy constante y si me prometo a mí misma hacer algo regularmente, después es muy difícil parar. Pero seraimente, a lo largo del tiempo, me he dado cuenta de que las notas de la danza improvisación son útiles para mí en distintas maneras. A través de la danza, observo cómo mi cuerpo y consciencia reacciona a varios eventos a largo plazo. Esto es una exploración multifacética de uno mismo en la danza, una búsqueda sin fin y la posibilidad del conocimiento. El diario de danza me llevó a sistematizar my conocimiento y a ofrecer un entrenamiento más profundo y productivo, mientras trabajaba con mis estudiantes. Finalmente, al hacer mis notas visibles al mundo, a menudo entro en contacto con gente creativa de distintos países y eso me inspira mucho. Así que mi intención principal es continuar manteniendo el diario, buscar nuevas facetas de danza improvisación y compartir mi conocimiento con quienes están abiertos al mismo.


Gentileza - Zoya Saganenko


AGV: ¿Cuál es tu opinión acerca del lenguaje de la danza en nuestra vida cotidiana individual y colectiva?

ZZ: El lenguaje de la danza es un concepto muy abarcativo. Creo que es un código completo de comunicación, al igual que lo es el lenguaje verbal, o cualqier otra práctica del cuerpo. En el mundo de la danza, todos comenzamos aprendiendo algunas técnicas básicas y vocabulario que alguien ya ha creado. Así como un niño aprende a caminar y hablar, los bailarines jóvenes aprenden a girar, saltar e interpretar combinaciones. Más tarde, cuando comenzamos a crear coreografía por nosotros mismos, estamos influenciados por el equipaje léxico que estudiamos previamente. A lo largo del tiempo, aprendiendo los principios de la composición y estudiando las capacidades del cuerpo humano, podemos llegar a nuevas formas y hablar a través de ellas, bailando un solo, ofreciendo coreografía a grupos de personas o de muchas otras maneras. Pero el resultado es el mismo: encontramos una manera de contar historias sobre la vida, en nuestro propio lenguaje de la danza. Y puede haber tantos de estos lenguajes como gente bailando en el mundo. Mientras que para los bailarines no profesionales, revelar su lenguaje de la danza no es menos importante para ellos. Simplemente, estoy convencida de que la danza en cualquier forma, es una de las mejores maneras de meditar y limpiar la mente de lo innecesario de cada día. Si tienes algo para decir y tienes herramientas técnicas, genial, tu danza se convertirá en arte. Pero sinó, aún tiene sentido para vos hablar al mundo a través del movimiento. Después de todo, un monólogo de danza es una maravillosa manera de entenderte a ti mismo más profundamente y expresar lo que es difícil poner en palabras.


Gentileza - Zoya Saganenko


AGV: Ha pasado bastante tiempo desde que Ucrania enfrenta una guerra. ¿Cuál es tu opinión acerca del arte de la danza en este terrible contexto?

ZZ: De hecho, Ucrania, enfrentó una guerra mucho antes, en 2014, cuando parte de los territorios fueron ocupados. En ese momento, la guerra no había sido oficialmente declarada, pero hace 2 años comenzó una invasión a gran escala. Tales eventos cambiaron radicalmente la vida de cualquier persona y dio vuelta su mundo interior; esto es obvio. Esto afectó profundamente la cultua el pas como una totalidad. Es un momento en el cual la gente muere en masa en la batalla por la supervivencia de la nación. Por supuesto, la pregunta por las apropiaciones de una variedad de cosas, se pone de manifiesto en la sociedad en estas circunstancias. Durante un primer momento, cuando la sociedad está en shock por lo que pasó, parece que ahora no es el momento de hablar sobre el arte de la danza en general. ¿De qué podemos hablar cuando la tarea principal es sobrevivir, salvar a los que amamos y frenar al invasor? Pero después de recuperarnos del primer estado de schok, el entendimiento viene de que sólo podemos sobrevivir unidos, trabajando en equipo. En este momento, el arte de la danza comienza a desarrollarse más allá de las dificultades. La gente abre escuelas de danza, organiza master clases y espectáculos, más allá de los bombardeos regulares en masa y las tragedias cotidianas. Cada cual hace lo que puede donde está ahora, donde tienen la fuerza emocional y la habilidad física para hacerlo. Esto es importante porque la cultura sirve como un soporte emocional para la gente. En tiempos terribles, es crucial creer y ver que hay energía hermosa, pura y brillante en este mundo. Es necesario entrar en contacto con esta energía, para recargarse de la misma. Así que la cultura de la danza se está desarrollando en Ucrania, más allá de todo. Esto sucede en su propio ritmo y ajustado a tópicos corrientes y circunstancias limitadas. Pero todas estas circunstancias, en el largo plazo, sólo llevarán al crecimiento porque los artistas tienen algo que decir después de todo lo que han experimentado y también porque saben exactamente por qué necesitan hablar.


Gentileza - Zoya Saganenko


AGV: ¿Qué entendés por comunicar a través de la danza?

ZZ: La danza es una energía de la fluidez. La intercambiamos cuando bailamos en pareja o en grupo. Las parejas tienen que aprender a escuchar al otro muy sensiblemente, para poder bailar juntos. Cuanto más desarrolles esta herramienta, más profundamente sientes cada vibración cercana. La gente de la danza se vuelve disponible para aplicar esto, no solamente en escena o en ensayo, sino también en la vida cotidiana. El cuerpo es un instrumento muy expresivo, el cambio postural te permite hablar claramente sin palabras si tu cuerpo se ha entrenado en esta herramienta. Por esto, los bailarines, como figuras públicas, son responsables de este mensaje que transmiten. Tenemos el poder de contar historias a grandes grupos de audiencias, a través de performances teatrales, videos creativos o simplemente, las redes sociales. Así que debemos usar nuestras voces para hablar sobre temas importantes en la sociedad, motivar y energizar, e infundir la fe.-


Sigue el trabajo de Zoya Saganenko aquí:

Instagram.com/zoyasaganenko