Por María Carolina Magnoni
Seis personas,
diferentes ritmos, diferentes movimientos.
Cuerpos y personajes diversos.
La rapidez de quien no sabe hacia dónde va.
La lentitud de quien percibe a través de la sensación corporal.
La incertidumbre de lo que viene,
la sensación de alerta ante los movimientos disruptivos.
Confusión,
el silencio que da lugar al vacío.
Sillas y mesas como obstáculos,
la vulnerabilidad en manos de otro,
la protección de quien está danzando.
La exageración de los gestos que denotan lo que no es auténtico,
un hombre y una mujer que fusionan sus cuerpos en un abrazo.
Las reiteradas caídas de la mujer desplomándose en el suelo,
la intensidad del encuentro y el desencuentro.
El desconcierto de lo inestable; de lo repetitivo y monótono.
El despliegue de la diversidad de los cuerpos.
El caos,
la expresión del ser en cada movimiento,
las diferentes maneras de afrontar lo incierto.
PINA BAUSCH. Cuerpo y Emociones
"No me interesa cómo se mueve el ser humano
sino aquello que lo conmueve"
Pina Bausch