Por Ornela Sabbatini
IG @ornelasabbatini
Luz Titilante
Diario de sombras en movimiento
Mirar.
Veo amanecer el horizonte. Puedo percibirlo, invitándome a ir a su encuentro.
Desandar el estado de tránsito. Caos transitado. Mirar con perspectiva para encontrar un orden interno, cuando todo lo externo parece derrumbarse. Sitúo la escritura como visión que repara, ordena y da forma al sentir. Miro las fichas desde lo alto.
Transitar el caos.
Tran-situar.
situar la mirada.
Escuchar.
Vuelvo a oír la propia vida y recupero vivencias. Situaciones que susurran pistas sobre cómo las cosas pueden funcionar de diferentes maneras. Confío en la escucha. En el caos de ruidos, de fondo suena una melodía que mi alma reconoce.
Tocar.
Meter las manos en la masa y las patas en el fango. En el barro creativo, el caos creativo. Poner el material disponible a la vista y empezar a pintar sobre el lienzo en blanco. Crear nuevas huellas de color. Huellas como memoria del movimiento.
Mirar, escuchar, tocar. ¿Las percepciones anuncian certezas? ¿anteceden al movimiento? ¿nos movemos desde la percepción? ¿Moverse es percibir? ¿o es el movimiento el que trae información percibida?
Palabras
como hilos
del relato
que voy tejiendo.
En la quietud se expanden los sentidos. En las pausas se agudiza la escucha. Expandir y contraer hasta hallar el ritmo. Entregarse al desencuentro y desanudar todas las versiones, hasta que vuelvan a magnetizarse. Las veces que sea necesario.
Hasta volver a ser la niña alegre que alguna vez fui.
Hasta volver a creer en la niña que habita en mí.
Luz titilante es un recorrido por el territorio de mi cuerpo, un viaje que oscila entre luces y sombras. Un diario que nace en el plano del movimiento y se sella en la escritura.
El texto compartido es la coordenada tres: territorio de la percepción. Fue gestado entre diversas canciones que componen una lista en Spotify. Aquí el enlace a una de las más significativas para estas líneas que comparto: